Las plantas carnivoras no son especialmente corrientes en nuestras casas, pero que por sus mismas características son dignas de comentario. Estas plantas carnívoras que se diferencian del resto de sus congéneres en un detalle un tanto insólito: en que se han adaptado a obtener los nutrientes directamente de los seres vivos.
Plantas carnívoras – Tipos y Cuidados
La causa por la que las plantas carnivoras se alimentan de otros seres vivos hay que buscarla en las zonas de que provienen, caracterizada por unos suelos con muy pocos elementos nutritivos. Las plantas carnivoras se alimentan, pues, de insectos y artrópodos, en el fondo nada realmente espectacular ni sanguinario, pero para lo cual han desarrollado unas técnicas realmente sofisticadas.
Por ejemplo, algunas plantas carnivoras recurren a sustancias pegajosas en las que quedan enganchadas las incautas víctimas, mientras otras tienen una forma que hace que el insecto se atreva a acercarse, todo para caer en una especie de pozo del que ya no volverá a salir. Los tipos de plantas carnivoras más conocidas, sin embargo, optan por cerrar sus hojas en forma de trampa cuando un insecto se posa sobre ellas.
Plantas carnivoras cuidados
Carnívoras, pero muy delicadas. Como te he dicho, las plantas carnívoras suelen crecer en zonas pobres en nutrientes, cálidas, muy húmedas y soleadas. Aunque se cultivan en invernaderos lo cierto es que las plantas carnivoras no son fáciles de cultivar en casa, aunque existen coleccionistas aficionados que se han especializado en ciertas variedades y tipos.
Aunque cuesta generalizar porque hay muchos especies de plantas carnivoras, cada uno con sus necesidades, para tener éxito en el cultivo casero hará falta regarlas con agua muy pobre en nutrientes, con un pH ácido. El calcio del agua del grifo no es adecuado para este tipo de plantas.
Las plantas carnívoras necesitan mucha humedad, por lo que un ligero descuido en el riego puede ser nefasto. No lo será menos la dieta que le des: en la naturaleza se alimentan de insectos, así que cualquier tipo de otro alimento, por muy apetitoso que sea (como el jamón o la carne), que puedas darles resultará en podredumbres fatales para estas plantas.
Además, las plantas carnívoras deben tener mucha luz y temperaturas cálidas durante todo el año. Son sensibles también a los ataques de hongos, por lo que se recomienda no mojar las hojas, pues ello favorece que crezcan los hongos. Una buena manera de cultivar las plantas carnivoras es en terrarios de vidrio, donde se pueden mantener temperaturas y condiciones de humedad estables.
Una cosa curiosa sobre las plantas carnivoras es que si las condiciones en las que se cultivan son ricas en nutrientes y tienen luz y agua abundante, muchas de estas plantas abandonan sus hábitos carnívoros para optar por la misma dieta que cualquier otra planta.